No me llames extranjero,
Ni pienses de dónde vengo,
mejor saber dónde vamos,
adónde nos lleva el tiempo...
No me llames extranjero,
mírame bien a los ojos,
mucho más allá del odio,
Del egoísmo y del miedo,
y verás que soy un hombre,
No puedo ser extranjero.”
Rafael amor
Me ha encantado Marina, porque ante todo somos personas, y nadie elige donde quiere nacer.
ResponderEliminar